Comporta Portugal

Un redescubrimiento: Comporta en Portugal

• Equipo: Angular, trípode, zoom, nd
• Distancia: A 600 km de madrid
• Presupuesto: Desde 90€
• Tipo: Pareja, familias

Seguramente has tenido el deseo en multitud de ocasiones de descubrir ese lugar que se convierta en tu «locus amoenus» donde tener la sensación de formar parte de algo, ya sea de una sociedad, de la naturaleza que lo rodea o de su estilo de vida, y sentirte seguro y en paz con el mundo y contigo mismo.

Y seguramente también lo hayas encontrado varias veces a lo largo de tu vida. A mí me ha pasado unas cuantas veces. Por suerte aún conservo alguno de esos «lugares idílicos» al mismo tiempo que voy añadiendo nuevos. Por desgracia, también voy perdiendo lugares que antes eran mágicos pero que a día de hoy, ya sea por su masificación, nuevas construcciones, pérdida de identidad y deriva hacia el turismo comercial de masas y estilo totalmente opuesto a lo que era cuando lo descubrí, han dejado de ser una opción para pasar unos días donde mi piel reacciona ante lo que no puede racionalizar y se convierte en la metáfora de la gallina.

Y no hablo únicamente de un espacio natural donde píen los pájaros, mujan las vacas a lo lejos o los delfines salten con la puesta de sol de fondo. Este lugar puede ser en la montaña, en una playa del sur de España, en un monasterio en Nepal o ante el ventanal de un rascacielos en Bangkok. Las emociones son incontrolables y no dependen de un sólo factor.

Explorar es descubrir. Sin lo primero no tendrás lo segundo

He tenido suerte de nuevo. He descubierto mi nuevo locus amoenus. Y de nuevo, tengo mucho miedo de que cambie, y más aún contándolo por aquí, pero la felicidad si no es compartida, no es felicidad completa.

A seis horas de Madrid en coche, Comporta en Portugal, es el destino que me ha facilitado este descubrimiento. He encontrado un lugar que es un remanso de paz, tranquilidad, pájaros cantando y ranas croando. Un lugar en el que descansar tomando el sol frente a un estanque natural donde refrescarme cuando el calor aprieta y dormir en una cómoda cama escuchando cómo el viento mueve suavemente las ramas de los pinos. Un lugar sin tiendas, coches, discotecas ni bares a kilómetros a la redonda que puedan perturbar mi tranquilidad -ya habrá tiempo de fiesta en otras ocasiones-, en el cual andar descalzo por el jardín o sobre la madera de mi bungalow y su terraza, y escribir este artículo aprovechando el tiempo al máximo.

Porque aquí el tiempo pasa despacio, da tiempo a todo. Te levantas y una inmensa sensación de paz y tranquilidad se apodera de tu cuerpo. La pereza es derrotada por las ganas de disfrutar. Un buen desayuno en la terraza observando cómo la naturaleza vive al ritmo que la felicidad marca, da paso a una cómoda ducha en el bungalow o a un primer baño en el estanque rodeado de nenúfares para, con el cuerpo adaptado a la situación, empezar a trabajar. Unos salen a correr por la enorme finca, otros prefieren darse un paseo a caballo o en las bicicletas disponibles y algunos sucumben ante el poder de una buena hamaca y la vitamina D del Sol.

Este lugar no es otro sino Cocoon Eco Design Lodges.

Las playas de Comporta en Portugal son impresionantes

Luego viene la playa. Porque aquí sí hay playa. Unos 100 kilómetros. La mayoría salvaje y por supuesto apta para todos los públicos. Si te gustan los chiringuitos donde tomar una bebida y algo para comer mientras observas las cristalinas aguas del Atlántico podrás hacerlo. Si quieres tumbonas donde estar lo menos posible en contacto con la fina arena, también. Si eres más de estar solo sin nadie a 50 metros -o muchos más- podrás hacerlo sin la necesidad de andar 30 minutos por la arena. Con parking, sin parking, de acceso para todos los públicos y otras para los más aventureros. Porque aquí no se puede construir sobre la playa, aquí puedes olvidarte de la civilización muy fácilmente. No hay motos haciendo ruido, ni bares con música alta que te confundan sobre el lugar donde te encuentras. Aunque ojo, también los podrás encontrar -no así las motos por suerte- si los buscas. Porque muchas veces también apetece tomarse algo con buena música de fondo mientras cae el sol sobre el mar.

Ya de vuelta a tu alojamiento, parando a cenar en alguno de los restaurantes de comida casera y barata desperdigados por la zona o bien llevando tu propia comida comprada en pequeños o grandes supermercados, el camino de acceso al Cocoon Eco Design Lodges supone una vuelta de tuerca a este sentimiento de independencia y aislamiento pero sin que falte ningún servicio básico, y por supuesto, con todas las comodidades para no querer salir nunca de aquí.

Si te parece muy lejos para ir en coche, piensa que tomando como punto de salida Madrid, está más cerca que ir a Cádiz. También puedes hacer noche y conocer Mérida, Badajoz o alguno de los preciosos pueblos del interior de Portugal, cuyo urbanismo debería ser tomado como ejemplo en nuestro país.

LISBOA

A 1 hora y 15 minutos en coche podemos llegar a Lisboa donde pasear entre tranvías, degustar los famosos pasteles de Belén y disfrutar de todo el ambiente que tiene la capital portuguesa.

Una pequeña escapada desde nuestro alojamiento para descubrir -o redescubrir- la ciudad, su herencia histórica y la vanguardia de sus restaurates y clubes nocturnos.

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